Por los alrededores de Castellbisbal

Hasta la mitad del siglo XII Castellbisbal se llamaba Ben Viure. Al pasar a ser feudatario de la sede de Barcelona, se empezó a denominar Castell del Bisbe, de donde derivó al nombre actual. La ermita de Sant Joan de Benviure, sin embargo, todavía se encarga de recordarnos el antiguo nombre de la villa. El itinerario propuesto nos permitirá también descubrir el lugar del pueblo más explotado geológicamente a lo largo de 2000 años: la cantera de Can Campanyà, de la que se extrajeron elementos estructurales del Pont del Diable, bloques para la construcción del templo parroquial y piedras para los muros de muchas de las casas del pueblo.

Desde la plaza de Folch i Torres tomamos abajo la avenida Gaudí y cruzamos la carretera. Aquí nace un sendero que bordea unos cultivos de viñas y nos lleva al camino de la Serra de Can Galí, que tomamos a la derecha.

Dejamos a la izquierda un par de caminos que marchan hacia los campos hasta un tercer cruce, donde tomamos el camino de la izquierda que baja pronunciadamente y se adentra en el bosque. Hay que seguir siempre las marcas lilas y blancas. Seguimos el camino hasta atravesar el torrente de Can Galí, donde el camino sube en dirección a una gran nave industrial. La bordeamos por la calle asfaltada hasta llegar a la masía de Ca n’Esteper y la ermita de Sant Joan de Bonviure. Su construcción está datada del siglo XI, a pesar de que los restos del actual son una reconstrucción del siglo XVII.

Parece ser que la ermita fue edificada sobre el cerro donde previamente ya se rendía culto en época preromana, concretamente al dios Júpiter. Esta es una deducción que se extrae de la piedra que se encuentra en la parte inferior de la pared derecha donde se pueden leer las iniciales siguientes: I. O. M. -Iovi Optimo Maximo- (A Júpiter, el mejor y el más grande).

Volvemos al otro lado de la nave industrial y tomamos a la derecha el camino de Ca n’Esteper hasta la urbanización Comte de Sert, que atravesamos por la avenida Lluís Millet, la calle Francesc Tàrrega, la calle Pep Ventura y finalmente la avenida de Gayarre, que baja hacia el torrente de Can Campanyà. A la derecha de la avenida veremos, en el tramo previo a atravesar el torrente, debajo de una casa, una formación rocosa rectangular donde se puede identificar perfectamente la extracción de grandes sillares.

Si os enfiláis arriba, podréis comprobar como toda la piedra está trabajada y cortada de tal manera que forma ángulos de 90º. Más abajo, en la curva que dibuja la avenida antes de cruzar el torrente, un camino se enfila hacia arriba paralelo a un torrente y nos permite llegar a otro tramo de la cantera.

Después de cruzar el torrente de Can Campanyà veremos a la derecha una verde explanada que nos permitirá descansar cómodamente. A la derecha de la carretera sale un sendero que se enfila haciendo atajo hasta la antigua masía de Can Campanyà, con alguna ventana bellamente decorada. La avenida de Can Campanyà nos llevará a una rotonda donde nace la calle Major, que se adentra en el pueblo y nos lleva al punto de salida.

En la explanada que hay después de la cantera encontramos una zona apta como zona de juegos y pícnic.